El secretario de Transporte, Sean Duffy, dijo que más de 9500 camioneros comerciales han sido retirados del servicio por no superar las pruebas de dominio del inglés, una cifra acumulada que, según él, pone de relieve el esfuerzo continuo por evitar que los operadores no cualificados supongan un peligro en las carreteras del país.
"¡Ya hemos retirado del servicio a 9500 camioneros por no hablar nuestro idioma nacional, el INGLÉS!". Duffy escribió en una publicación del 10 de diciembre en X. "Esta administración siempre antepondrá la seguridad de usted y su familia".
El recuento refleja las medidas de aplicación acumuladas desde mayo, cuando el Departamento de Transporte restableció las sanciones de retirada del servicio para los conductores que no saben leer o hablar inglés lo suficientemente bien como para conducir un vehículo comercial.
El presidente Donald Trump y Duffy han afirmado que la renovación de la aplicación de la ley es necesaria para garantizar que los camioneros puedan entender las señales de tránsito, comunicarse con la policía y los inspectores, y seguir las instrucciones en los puestos de control y las estaciones de pesaje.
"America First significa seguridad primero", dijo Duffy en mayo. "Los estadounidenses están mucho más seguros en las carreteras junto a camioneros que pueden entender e interpretar nuestras señales de tránsito. Este cambio de sentido común garantiza que la sanción por incumplimiento sea más que una simple amonestación".
La medida se produce después de que Trump firmara en marzo una orden ejecutiva que designa el inglés como idioma oficial del país. En abril, firmó otra orden en la que ordenaba a Duffy que se asegurara de que los conductores de camiones comerciales que no cumplieran con los estándares de dominio del inglés fueran retirados del servicio.
"Mi Administración hará cumplir la ley para proteger la seguridad de los camioneros, conductores, pasajeros y otras personas estadounidenses, entre otras cosas, haciendo cumplir las normas de seguridad que garantizan que cualquier persona al volante de un vehículo comercial esté debidamente cualificada y domine nuestro idioma nacional, el inglés", escribió Trump en la orden de abril. "Es de sentido común".
La orden de abril de Trump derogó una norma de la era Obama según la cual los inspectores podían multar a los camioneros por no cumplir los requisitos de inglés, pero no se les permitía retirarlos del servicio, según indicó la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes en un memorándum de mayo.
Los accidentes mortales provocan una represión más amplia
El requisito de dominio del inglés forma parte de una campaña más amplia para reforzar la supervisión de las licencias comerciales tras una serie de accidentes mortales en los que se vieron involucrados conductores extranjeros o no residentes. Posteriormente se descubrió que varios de esos conductores habían suspendido las pruebas de inglés o tenían licencias expedidas por error por los estados.En un caso ocurrido en Florida, el ciudadano indio Harjinder Singh fue acusado de matar a tres personas tras realizar un giro ilegal en U con un semirremolque.
Harjinder Singh es escoltado a un avión por el vicegobernador de Florida, Jay Collins, y las fuerzas del orden en Stockton, California, el 21 de agosto de 2025. (Benjamin Fanjoy/AP Photo).Las autoridades dijeron que Singh, que se encontraba en Estados Unidos de forma ilegal, suspendió un examen de inglés, solo respondió correctamente a dos de las 12 preguntas y solo pudo identificar una de las cuatro señales de tráfico. A pesar de ello, el estado de Washington le expidió un permiso de conducir comercial (CDL) con validez total en 2023, y California le expidió un segundo CDL en 2024.
Singh se declaró inocente en septiembre. The Epoch Times se puso en contacto con el abogado de Singh para recabar sus comentarios en ese momento, pero no recibió respuesta.
Las auditorías federales han identificado casos similares en California, Nueva York, Pensilvania y otros estados, lo que ha provocado un escrutinio generalizado de las prácticas de concesión de licencias estatales.
Los estados se enfrentan a presiones y a la pérdida de financiamiento
Las inhabilitaciones masivas se producen tras la auditoría en curso del Departamento de Transporte sobre la forma en que los estados expiden permisos de conducir comerciales (CDL) a conductores extranjeros no residentes. En septiembre, Duffy emitió unas restricciones de emergencia después de que los auditores encontraran un "patrón catastrófico" de incumplimiento en múltiples jurisdicciones, destacando California como el caso más grave.La auditoría reveló que más del 25 % de los CDL sin domicilio en California se habían expedido de forma indebida, muchos de ellos a conductores cuya presencia legal en Estados Unidos había expirado meses o años antes. Un ciudadano brasileño recibió autorizaciones para conducir autobuses escolares después de que sus documentos de inmigración hubieran caducado, en un caso que el Departamento de Transporte calificó de impactante.
Un cartel en una rueda de prensa celebrada por el secretario de Transporte de Estados Unidos, Sean Duffy, en la sede del Departamento de Transporte en Washington el 30 de octubre de 2025. (Arjun Singh/The Epoch Times)."Lo que nuestro equipo ha descubierto debería inquietar y enfadar a todos los estadounidenses", dijo Duffy en septiembre. "Se están expidiendo permisos para conducir camiones enormes de 80,000 libras a conductores extranjeros peligrosos, a menudo de forma ilegal. Esto supone una amenaza directa para la seguridad de todas las familias que circulan por las carreteras, y no lo voy a tolerar".
Desde entonces, el Departamento de Transporte ha amenazado con retener decenas de millones de dólares de los fondos federales para la seguridad vial de California, Washington y Nuevo México, a menos que apliquen plenamente las normas sobre el idioma inglés y revoquen los permisos expedidos indebidamente. Solo California corre el riesgo de perder más de 40 millones de dólares, aunque las autoridades estatales han afirmado que ya exigen pruebas de inglés durante los exámenes de conducción comercial.
La campaña contra el uso de idiomas extranjeros coincide con el endurecimiento de las medidas de inmigración dirigidas a los conductores comerciales que se encuentran en el país de forma ilegal.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, dijo en octubre que 146 inmigrantes ilegales que conducían semirremolques fueron detenidos durante una operación conjunta del ICE y la Policía Estatal de Indiana cerca de la frontera con Illinois. Más de 40 conductores tenían permisos de conducir comerciales expedidos por estados como California, Illinois y Nueva York.
"Demasiados estadounidenses inocentes han muerto a causa de extranjeros ilegales que conducían semirremolques y camiones grandes", dijo Noem en una declaración el 30 de octubre. "Y, sin embargo, los estados santuario de todo el país han estado expidiendo permisos de conducir comerciales a extranjeros ilegales. La Administración Trump está poniendo fin al caos".
