El 17 de septiembre, un sheriff de Utah proporcionó más detalles sobre la detención de Tyler Robinson, sospechoso del asesinato de Charlie Kirk, y afirmó que el sospechoso temía que las fuerzas del orden le dispararan.
El sheriff del condado de Washington, Nate Brooksby, dijo que recibió una llamada de un agente de policía jubilado que había trabajado para él y conocía a la familia Robinson. Le dijeron que la familia Robinson quería que el sospechoso se entregara voluntariamente, añadió.
"Durante esa llamada telefónica, se proporcionó información sobre la posibilidad de que Tyler tuviera ideas suicidas y se dirigiera a una zona remota del condado de Washington", dijo Brooksby a los periodistas en una rueda de prensa. "Los padres lo convencieron de que no lo hiciera y le transmitieron que lo apoyarían y lo ayudarían... a entregarse pacíficamente".
El agente jubilado llevó a Robinson y a sus padres a la oficina del sheriff en menos de una hora desde la llamada, añadió.
"Tyler sabía que era inevitable, con toda la presión de las fuerzas del orden, su foto en las noticias, el arma, el arma en las noticias", dijo. "Sabía que era inevitable... que lo atraparían".
"Temía que un equipo SWAT irrumpiera en su casa o que las fuerzas del orden le dispararan", dijo Brooksby. "Así que parte de la negociación y de conseguir que se entregara fue que lo trataríamos con la mayor delicadeza y suavidad posible para que se sintiera cómodo y se presentara en mi oficina".
Los fiscales dijeron el martes que la madre de Robinson había declarado a los investigadores que su hijo se había vuelto más político en los últimos años y más izquierdista, y también "más favorable a los derechos de los homosexuales y los transexuales". Robison también mantenía una relación sentimental con su compañero de piso, un hombre que se identificaba como mujer transgénero, según los fiscales.
Cuando le preguntaron por qué había cometido el asesinato, Robinson respondió a sus padres: "Hay demasiado mal y ese tipo difunde demasiado odio", refiriéndose a Kirk, según los fiscales. Kirk era un comentarista político conservador y un destacado partidario del presidente Donald Trump.
Las autoridades encontraron huellas dactilares de Robinson en el gatillo del rifle y pruebas de ADN en una toalla que había utilizado para envolver el arma, según informaron las autoridades. Las balas recuperadas tenían mensajes grabados, algunos de ellos antifascistas, según las autoridades.
Mientras tanto, Brooksby sugirió que la familia Robinson se mantuviera alejada de la atención pública durante un tiempo debido a las amenazas.
"Desgraciadamente, tienen que pasar desapercibidos durante mucho tiempo", dijo, y añadió que tiene un "primo segundo apellidado Robinson, que es optometrista en la ciudad, y su consulta ha estado recibiendo llamadas amenazantes".
"Es una situación muy pesada, ya que ellos no tienen nada que ver con esto. No tienen ninguna relación con la familia. Piensen en cómo se sienten ahora mismo las personas realmente implicadas en este incidente", dijo.
En la rueda de prensa, también trató de desmentir las afirmaciones que circulaban por Internet de que el padre de Robinson era ayudante del sheriff o había esposado personalmente a su hijo. Brooksby dijo que el ayudante jubilado que le alertó sobre la posible implicación de Tyler Robinson tiene el mismo nombre y apellido que el padre de Robinson.
Robinson compareció por primera vez ante la corte el martes, y el juez ordenó su detención sin fianza y fijó la próxima audiencia para el 29 de septiembre. No se le asignó ningún abogado y no está claro si tiene un abogado o un portavoz que pueda hablar en su nombre.
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