El juez federal Mark Wolf anunció públicamente su jubilación el domingo en un artículo publicado en The Atlantic, en el que afirmaba que no podía seguir en el cargo después de 40 años porque quería expresar su preocupación por lo que calificó como "amenaza a la democracia" del presidente Donald Trump.
En la carta pública de dimisión de Wolf, el veterano juez escribió que "ya no puede soportar estar limitado por lo que los jueces pueden decir públicamente o hacer fuera de la sala de la corte".
Wolf, de 78 años, fue nombrado por el presidente Ronald Reagan en 1985 y confirmado por el Senado de los Estados Unidos. El proceso de nombramiento incluye que los presidentes tengan la oportunidad de consultar con los senadores del estado —que en ese momento eran Ted Kennedy y John Kerry— sobre los posibles candidatos a la corte de distrito, según el Congreso.
Su jubilación fue anunciada por la corte el viernes.
En su carta, Wolf alegó que Trump estaba utilizando la ley como arma.
"El presidente Donald Trump está utilizando la ley con fines partidistas, atacando a sus adversarios y protegiendo a sus amigos y donantes de investigaciones, enjuiciamientos y posibles castigos", escribió Wolf en el artículo. "Esto es contrario a todo lo que he defendido en mis más de 50 años en el Departamento de Justicia y en la magistratura".
Una portavoz de la Casa Blanca respondió a la noticia el miércoles.
"Los jueces que quieren introducir su propia agenda personal en la ley no tienen cabida en la magistratura", dijo la portavoz Abigail Jackson a The Epoch Times en un correo electrónico. "Esta es la realidad: con más de 20 victorias en la Corte Suprema, las políticas de la Administración Trump han sido constantemente confirmadas por la Corte Suprema como legales, a pesar de un número sin precedentes de impugnaciones legales y sentencias ilegales de cortes inferiores.
"Y cualquier otro juez radical que quiera quejarse a la prensa debería al menos tener la decencia de dimitir antes de hacerlo", añadió.
Wolf presidió algunos de los casos más conocidos del estado y fue el primer juez federal en aprobar una operación de cambio de sexo financiada por el estado en 2012 para un asesino convicto que se identificaba como transgénero. La decisión del juez fue inicialmente confirmada por un panel de tres jueces, pero posteriormente fue revocada después de que los funcionarios de la prisión apelaran el caso ante el pleno de la Corte de Apelaciones del Primer Circuito de Estados Unidos.
También testificó públicamente en el Senado de Estados Unidos durante una investigación sobre el juez de la Corte Suprema Clarence Thomas en relación con el proceso de denuncia ética de los jueces en 2023.
La noticia de la declaración de jubilación del juez provocó algunas críticas entre los republicanos.
Mike Davis, abogado y exasesor jefe de nominaciones del Comité Judicial del Senado, dijo que Wolf no estaba siendo honesto con el público al afirmar que era conservador.
"Mark está engañando a todo el mundo al fingir que es un republicano de Reagan", publicó Davis el domingo en X.
Según la corte, Wolf se graduó en la Universidad de Yale y en la Facultad de Derecho de Harvard. Impartió cursos sobre el papel de los jueces en la democracia estadounidense en Harvard, Boston College, New England y la Facultad de Derecho de la Universidad de California-Irvine. También dio clases sobre políticas públicas en la Harvard Kennedy School.
La jueza principal de la Corte de Distrito de Massachusetts, Denise Casper, dijo que había prestado sus servicios con distinción.
"Su firme compromiso con el estado de derecho, su determinación a la hora de lidiar con cuestiones novedosas de hecho y de derecho, y su dedicación a tomar decisiones justas, equitativas y jurídicamente sólidas, sin temor ni favoritismos, son las señas de identidad de su etapa en la magistratura", afirmó Casper en un comunicado. "Sus numerosas opiniones sobre cuestiones jurídicas complejas en casos notables han tenido un gran impacto en la jurisprudencia".
