Los votantes de la ciudad de Nueva York enviaron un mensaje claro el 24 de junio. Eligieron al asambleísta Zohran Mamdani, de 33 años, que se autodenomina socialista democrático, en lugar del exgobernador Andrew Cuomo en las primarias demócratas para la alcaldía.
Aunque el sistema de votación por orden de preferencia de la ciudad no procesará oficialmente los resultados hasta al menos el 1 de julio, Cuomo concedió la derrota poco después de que la primera ronda de recuentos por orden de preferencia mostrara a Mamdani en cabeza. Cuomo, en declaraciones a sus seguidores, calificó el resultado como «la noche del asambleísta Mamdani» y elogió una «campaña de gran impacto».
Cuomo buscaba volver al poder a pesar de su dimisión como gobernador en 2021, mientras que el actual alcalde, Eric Adams, se saltó las primarias tras abandonar el Partido Demócrata para presentarse como independiente. Los grupos progresistas respaldaron a Mamdani, que se presentó con un programa de congelación de los alquileres, autobuses gratuitos y subida de impuestos a las rentas altas.
«Ocho meses después de lanzar esta campaña con la visión de una ciudad que todos los neoyorquinos pudieran permitirse, hemos ganado», declaró Mamdani a sus seguidores en su discurso de victoria. «Hemos ganado porque los neoyorquinos han defendido una ciudad que pueden permitirse, una ciudad en la que pueden hacer algo más que luchar. Una ciudad en la que aquellos que trabajan duro por la noche pueden disfrutar de los frutos de su trabajo durante el día».
La sorpresa de Mamdani llega en un momento en que los demócratas nacionales instan a la moderación tras la derrota de la entonces vicepresidenta Kamala Harris en las elecciones presidenciales de 2024. Una encuesta de Reuters/Ipsos realizada entre el 11 y el 16 de junio reveló que el 62 % de los demócratas quiere un nuevo liderazgo y un enfoque más centrado en la economía básica, mientras que el 86 % está a favor de aumentar los impuestos a los ricos.
El gobernador de Minnesota, Tim Walz, compañero de fórmula de Harris, se hizo eco de ese sentimiento el 13 de junio, cuando dijo a los demócratas que debían «afinar [el] mensaje» y volver a conectar con los votantes rurales y de clase trabajadora.
Los observadores que hablaron con The Epoch Times tras la victoria de Mamdani vieron el enfrentamiento.
«Me sorprende lo mal que lo ha hecho Andrew Cuomo», dijo Kaivan Shroff, votante demócrata y exdelegado del Comité Nacional Demócrata (DNC), que situó a Cuomo en primer lugar en su voto por orden de preferencia y no incluyó a Mamdani.
«Una conclusión para el establishment es que, por supuesto, la gente da prioridad a las políticas. Creo que muchos demócratas del establishment siguen sin estar contentos con la victoria de Mamdani, pero no sé si Cuomo les obligó a acudir a las urnas y a hacer esa declaración».
Adin Lenchner, estratega demócrata con 15 años de experiencia y afincado en Brooklyn, afirmó que Mamdani «ganó jugando con el manual».
«La autenticidad genera confianza», declaró a The Epoch Times en una entrevista. «Genera resiliencia. Ayuda a aislar una campaña de los ataques externos, las tergiversaciones y las calumnias. Y creo que es esa autenticidad y ese enfoque preciso en la vida y la asequibilidad lo que le ha ayudado a superar las dificultades, y los votantes le han recompensado».
Cuomo solo ganó en el Bronx y Staten Island, mientras que Mamdani se impuso en Manhattan, Queens y Kings, según los resultados no oficiales de las elecciones. Los aliados de Cuomo, entre ellos el expresidente Bill Clinton, el exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg y el representante Jim Clyburn (D-Carolina del Sur), le dieron su apoyo, y Bloomberg y otros gastaron millones en anuncios, pero Shroff calificó los respaldos de «un poco cansinos y obsoletos».
«Especialmente en la era de los influencers, hay muchas voces a las que la gente presta atención. Entre ellas, se incluyen más microinfluencers y voces locales relevantes. No creo que eso diga mucho, y no me sorprende que no haya influido necesariamente en los resultados», afirmó.
De cara a las elecciones generales de noviembre, Adams, ahora independiente, rápidamente definió lo que está en juego.
«Nos merecemos un alcalde que siga reduciendo la delincuencia, apoyando a nuestra policía, luchando contra el antisemitismo y defendiendo a los neoyorquinos de clase trabajadora», escribió en la red social X el martes por la noche.
«Lo que Nueva York se merece es un alcalde que se enorgullezca de su trayectoria, no uno que huya de ella o que no tenga ninguna», añadió Adams, refiriéndose a la controvertida dimisión de Cuomo como gobernador y a la breve carrera política de Mamdani hasta la fecha.
Mientras tanto, algunos republicanos esperan que la victoria de Mamdani permita al Partido Republicano tachar a los demócratas de extremistas a nivel nacional, en caso de que gane en noviembre, aunque el Partido Republicano tenga aún un largo camino por recorrer antes de ganar en la propia ciudad.
«Destacar que los demócratas de Nueva York han votado a un socialista sin experiencia con políticas sociales y económicas radicales jugará a favor de los republicanos en distritos de todo Estados Unidos», afirmó el estratega republicano Matt Klink en una respuesta por correo electrónico a las preguntas de The Epoch Times.
Dijo que «no hay que sorprenderse» si el presidente Donald Trump y otros republicanos convierten a Mamdani en el rostro del Partido Demócrata, emparejándolo con dos de los progresistas más conocidos, la representante Alexandria Ocasio-Cortez (D-Nueva York) y el senador Bernie Sanders (independiente por Vermont), que forma parte del grupo parlamentario demócrata y se presentó a las primarias demócratas para la presidencia en 2016 y 2020.
«Los republicanos posicionarán el mandato de Mamdani como alcalde, si gana en otoño, como similar al del alcalde de Chicago, Brandon Johnson, que ahora tiene un 6 % de popularidad», añadió Klink, refiriéndose a una encuesta de febrero que mostraba que solo el 6.6 % de los votantes tenía una opinión favorable de Johnson.
Curtis Sliwa, el candidato republicano a la alcaldía que perdió frente a Adams en 2021, calificó a Mamdani de «demasiado extremista para una ciudad que ya está al límite» en una publicación en X. Sliwa tiene una dura batalla por delante para conseguir votos en una ciudad con una fuerte inclinación demócrata, donde obtuvo 302,680 votos frente a los 753,801 de Adams en las últimas elecciones.
Aun así, los analistas advierten que no hay que sobreinterpretar el resultado.
«No creo que estas elecciones sean necesariamente predictivas», dijo Lenchner. «No creo que nos digan necesariamente hacia dónde va todo el país, pero sí creo que son una ventana a la energía que se está generando dentro del partido».
El estratega demócrata señaló que los demócratas de la ciudad de Nueva York son solo una parte de los votantes del partido, que suelen ser más liberales que el partido a nivel nacional.
«Creo que lo más instructivo y revelador es que muchos de los temas por los que Mamdani hizo campaña son temas que resuenan entre los votantes a nivel nacional y en muchas de las reñidas contiendas que se celebrarán en 2026 y 2028», afirmó.
Aún no está claro si Mamdani podrá traducir la energía activista en capacidad de gobierno. Cuomo dijo que «analizará» los resultados completos antes de decidir si se presenta como independiente, mientras que Adams corteja a los moderados recelosos de un cambio radical.
Por ahora, el ala izquierda del Partido Demócrata se queda con el mayor premio municipal en décadas, justo cuando muchos líderes del partido insisten en que el camino de vuelta al poder pasa por el centro.
La campaña de Mamdani no respondió a las preguntas enviadas por correo electrónico el miércoles.
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