La explosión de un coche cerca de Moscú causó la muerte de un importante militar ruso, según anunció el Comité de Investigación de Rusia en un comunicado emitido el 25 de abril.
El incidente, que tuvo lugar el viernes, consistió en la explosión de un Volkswagen Golf en la calle Nesterov, en la ciudad de Balashikha, y causó la muerte del teniente general Yaroslav Moskalik, de 59 años. Moskalik era subjefe de la Dirección de Operaciones Principales del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia. Representó al Ministerio de Defensa del país en varias negociaciones.
«Según los datos disponibles, la explosión se produjo como consecuencia de la detonación de un artefacto explosivo casero lleno de elementos impactantes», afirmó el comité, según la traducción al inglés del comunicado.
«El grupo de trabajo de investigación, formado por investigadores, expertos forenses, especialistas y empleados de las unidades operativas de las fuerzas del orden, comenzó a examinar el lugar del incidente».
Moskalik fue la única víctima mortal de la explosión, según informó el viernes el medio de comunicación estatal ruso TASS.
El comité de investigación abrió una causa penal por asesinato y tráfico ilegal de explosivos.
Citando a funcionarios de respuesta a emergencias, TASS dijo que el artefacto que provocó la explosión tenía una potencia superior a 300 gramos de TNT.
Moskalik es uno de los últimos altos mandos militares rusos fallecidos en una explosión. Otro alto cargo ruso, el teniente general Igor Kirillov, murió en una explosión en diciembre del año pasado tras detonar una bomba colocada en una moto aparcada cerca de un bloque de apartamentos en Moscú. El asistente de Kirillov también falleció en el incidente.
Kirillov era el jefe de las Fuerzas de Defensa Nuclear, Biológica y Química de Rusia. Su muerte se produjo un día después de que una corte ucraniana lo condenara por el presunto uso de armas químicas prohibidas por parte de Rusia en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
La administración Trump está instando a Rusia a poner fin a su guerra contra Ucrania, que comenzó en febrero de 2022.
«No estoy contento con los ataques rusos contra Kiev. No son necesarios y son muy inoportunos. ¡Vladimir, detente! Están muriendo 5000 soldados a la semana. ¡Hagamos el acuerdo de paz!», escribió Trump en una publicación del 24 de abril en Truth Social después de que Moscú bombardease Kiev con misiles y ataques con drones el jueves.
Al menos nueve personas murieron y más de 70 resultaron heridas en el reciente ataque a Kiev, según el Gobierno ucraniano. Se trata del mayor ataque contra la capital del país desde julio del año pasado.
El miércoles, el vicepresidente JD Vance dijo que Estados Unidos abandonaría las conversaciones para resolver el conflicto si las dos naciones rechazaban la propuesta de Washington para poner fin a la guerra.
«Hemos presentado una propuesta muy explícita tanto a los rusos como a los ucranianos, y es hora de que digan que sí o de que Estados Unidos se retire del proceso», declaró a los periodistas en la India durante una visita de Estado.
La Casa Blanca «realizó una cantidad extraordinaria de diplomacia y de trabajo sobre el terreno», afirmó.
«Realmente hemos intentado entender las cosas desde la perspectiva tanto de los ucranianos como de los rusos. ¿Qué es lo que más les importa a los ucranianos? ¿Qué es lo que más les importa a los rusos? Y creo que hemos elaborado una propuesta muy justa», afirmó.
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