El líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries (D-N.Y.), pronunció un largo discurso el 3 de julio en un intento de retrasar la votación del Gran y Hermoso Proyecto de Ley, que consiste en la agenda legislativa del presidente Donald Trump.
«Sigo aquí para tomarme mi tiempo», dijo en la Cámara de Representantes.
Jeffries está utilizando una herramienta procedimental llamada «minuto mágico», que permite a los líderes disponer de tiempo ilimitado en la Cámara. Comenzó a hablar justo antes de las 5 de la madrugada, hora del este.
El megaproyecto de ley impulsado por el Partido Republicano superó un obstáculo procedimental clave alrededor de las 3 de la madrugada, hora del este, tras una noche de negociaciones entre los líderes republicanos de la Cámara de Representantes y una docena de detractores. Los líderes republicanos finalmente convencieron a los detractores, allanando el camino para su aprobación en la votación final. Si el proyecto de ley supera la votación final, pasará al escritorio de Trump para su firma.
Jeffries, en su discurso de varias horas, se ha centrado principalmente en Medicaid, al que se le recorta más de un billón de dólares en el proyecto de ley.
El líder de la minoría calificó la legislación como un «ataque sin precedentes» a la red de seguridad social.
«Nuestros colegas republicanos de la Cámara, señor presidente, tienen una última oportunidad de unirse a nosotros, a los demócratas, a todos y cada uno de los demócratas que van a levantarse y proteger la asistencia sanitaria del pueblo estadounidense, levantarse y proteger la ayuda nutricional del pueblo estadounidense, levantarse y proteger a nuestros agricultores, levantarse y proteger a nuestros veteranos, levantarse y proteger la economía de la energía limpia, levantarse para proteger nuestras escuelas públicas», afirmó.
Jeffries leyó historias de estadounidenses comunes y corrientes que dependen del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria y otros servicios gubernamentales, argumentando que estos servicios no deben recortarse.
También citó cartas de republicanos moderados de la Cámara de Representantes, en las que expresaban su preocupación por el alcance de los recortes a Medicaid.
El récord de un discurso de «minuto mágico» es de poco más de 8 horas, establecido por el expresidente de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy (R-Calif) en 2021, en protesta por la agenda del presidente Joe Biden. El récord anterior lo ostentaba la representante Nancy Pelosi (D-Calif.), quien habló en apoyo de los «soñadores» —niños traídos ilegalmente al país por sus padres— antes de una votación sobre ellos.
A principios de este año, el senador Cory Booker (D-N.J.) rompió el récord del discurso más largo en la historia del Senado, establecido anteriormente por el exsenador Strom Thurmond, quien en el momento de pronunciar el discurso, en protesta por la Ley de Derechos Civiles de 1957, era demócrata antes de pasarse al Partido Republicano. Mientras que Booker consiguió que otros senadores se unieran a él durante su discurso, las normas de la Cámara de Representantes prohíben a Jeffries que nadie más hable durante su turno.
El representante Hank Johnson (D-Ga.) declaró a The Epoch Times que le gustaría que Jeffries batiera el récord de la Cámara.
«Sería un noble discurso de ocho horas, y me gustaría que le quitara el récord a un orador innoble y lo mantuviera», dijo.
Además de recortar Medicaid —lo que el Partido Republicano calificó como un esfuerzo para erradicar el despilfarro, el fraude y el abuso—, el proyecto de ley incluye fondos para la seguridad fronteriza, como la finalización del muro de Trump en la frontera sur, y 150,000 millones de dólares para el ejército.
La legislación también hace permanentes los recortes fiscales individuales de la Ley de Recortes Fiscales y Empleo.
El proyecto de ley también retira la financiación federal a Planned Parenthood durante un año.
Nathan Worcester contribuyó a este artículo.
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