El presidente Donald Trump dijo el 30 de noviembre que la congelación de las decisiones sobre asilo, impuesta tras el tiroteo de dos miembros de la Guardia Nacional en Washington, probablemente se mantendrá indefinidamente.
Sus comentarios se produjeron después de que el director de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, Joseph B. Edlow, anunciara que la agencia ha suspendido todas las decisiones sobre asilo hasta que pueda garantizar que "todos los extranjeros sean investigados y seleccionados en la mayor medida posible".
Cuando se le preguntó sobre cuánto tiempo tiene previsto el gobierno suspender las decisiones sobre asilo, Trump respondió que la medida "no tiene límite de tiempo" y que podría prolongarse "durante mucho tiempo".
"No queremos a esas personas. Ya tenemos suficientes problemas", declaró el presidente a los periodistas a bordo del Air Force One.
Trump dijo que se refería a "personas de diferentes países que no son amigos nuestros" y de "países que están fuera de control", y puso como ejemplo a Somalia.
Cuando se le preguntó si existe una lista de países cuyos ciudadanos se enfrentarían a restricciones de asilo en Estados Unidos, Trump se refirió a las 19 naciones etiquetadas por su administración como "países de preocupación identificada".
"No creo que todos sean del tercer mundo, pero en muchos casos sí lo son. No son buenos países. Son países con mucha delincuencia", añadió. "Y, francamente, no necesitamos que su gente venga a nuestro país a decirnos lo que tenemos que hacer".
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos anunció la pausa después de dejar de tramitar todas las solicitudes de inmigración relacionadas con ciudadanos afganos, a la espera de una revisión más detallada de los protocolos de seguridad y control.
Para que un inmigrante pueda optar al asilo, el solicitante debe "temer ser perseguido por motivos de raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas o pertenencia a un determinado grupo social", según el Consejo de Refugiados de Estados Unidos.
La medida se tomó tras el tiroteo del 26 de noviembre contra dos miembros de la Guardia Nacional, uno de los cuales murió y el otro resultó gravemente herido, cerca de la Casa Blanca, que según las autoridades fue perpetrado por un ciudadano afgano que entró en Estados Unidos en septiembre de 2021 a través de la Operación Allies Welcome, el programa de reasentamiento de la era Biden puesto en marcha tras la retirada estadounidense de Afganistán.
Trump denunció el tiroteo como un "acto de odio" y prometió "detener de forma permanente la migración procedente de todos los países del Tercer Mundo" para permitir la plena recuperación del sistema estadounidense.
El 27 de noviembre afirmó que su administración suspendería todas las prestaciones y subsidios federales a los no ciudadanos, desnaturalizaría a los inmigrantes que socavaran la tranquilidad interna y deportaría a cualquier extranjero considerado "una carga pública, un riesgo para la seguridad o incompatible con la civilización occidental".
"Estos objetivos se perseguirán con el fin de lograr una reducción importante de las poblaciones ilegales y perturbadoras, incluidas las admitidas a través de un proceso de aprobación automática no autorizado e ilegal", declaró Trump en Truth Social. "Solo la MIGRACIÓN INVERSA puede curar completamente esta situación".
Con información de Jacki Thrapp.
