Un destacado autor chino-estadounidense y activista prodemocrático desde hace mucho tiempo, insta al gobierno y a la opinión pública estadounidenses a hacer frente a la creciente campaña de represión transnacional de Beijing, que cada vez más se dirige contra Shen Yun Performing Arts y el grupo espiritual Falun Gong en territorio estadounidense.
Basándose en su propia experiencia tras editar un libro sobre la masacre de la plaza de Tiananmen, Jiang Pinchao arrojó luz sobre hasta dónde está dispuesto a llegar el Partido Comunista Chino (PCCh) para silenciar la disidencia dentro y fuera de las fronteras de China.
Desde su fundación en Nueva York en 2006, Shen Yun Performing Arts ha tenido como objetivo revivir la cultura tradicional china y presentar "la China anterior al comunismo". El PCCh ha convertido a Shen Yun en un objetivo prioritario para el sabotaje, el acoso y otras amenazas y ataques durante años.
En 2024, la compañía de danza con sede en Nueva York se enfrentó a una avalancha de ataques mediáticos, difamaciones en Internet, demandas judiciales y una oleada de amenazas de bomba y de muerte dirigidas a los teatros que acogían los espectáculos de Shen Yun, así como al campus de formación de la compañía.
"Se trata de una guerra sin restricciones, y es terrorismo de Estado", declaró Jiang a The Epoch Times.
Jiang, un cristiano devoto y autor cuyas obras se archivan en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, ha sido él mismo blanco de las tácticas coercitivas del PCCh.
"El PCCh quiere destruir tu espíritu a través del miedo, sumirte en una guerra psicológica de la que sientes que no puedes escapar", dijo Jiang.
Jiang fue el editor de "Colección de poemas del 4 de junio", una antología de 2007 que documenta las voces de los supervivientes de la masacre de la plaza de Tiananmen de 1989 y de los partidarios del movimiento prodemocrático liderado por estudiantes chinos que la precedió. Entre los activistas democráticos chinos, el libro se conoce simplemente como "Poemas de Tiananmen".
Recordó cómo, a mediados de la década de 2000, recibió amenazas persistentes y abusos en línea por su trabajo de recopilación de los Poemas de Tiananmen. Su bandeja de entrada de correo electrónico se inundó de amenazas de muerte. En los foros, los ataques coordinados de trolls para difamarlo y desacreditarlo fueron abrumadores, dijo Jiang.
"Sentía como si todo el mundo estuviera controlado por estas fuerzas", dijo. "Y cuando me di cuenta de que mis llamadas telefónicas privadas estaban siendo monitoreadas, sentí como si alguien me siguiera a todas partes. El ambiente era profundamente intimidante".
Según múltiples denunciantes del PCCh, la última campaña de represión transnacional, iniciada por el líder chino Xi Jinping en 2022, se ha dirigido específicamente contra Falun Gong, su fundador, el Sr. Li Hongzhi y tres entidades fundadas por practicantes de Falun Gong: Shen Yun, The Epoch Times y NTD Television.
Falun Gong es una práctica espiritual que ganó popularidad en la década de 1990, con entre 70 y 100 millones de practicantes. Luego, en 1999, los máximos dirigentes del régimen ordenaron la persecución de Falun Gong. Desde entonces, millones de personas son objeto de detenciones arbitrarias, torturas, trabajos forzados e incluso la sustracción forzada de órganos. El régimen comunista también utiliza su aparato mediático controlado por el Estado y su influencia sobre los medios de comunicación extranjeros para reforzar su persecución.
En 2024, The New York Times publicó 12 artículos muy críticos con Falun Gong y Shen Yun. Los artículos fueron objeto de críticas por basarse en gran medida en las declaraciones de un puñado de antiguos artistas de Shen Yun.
"Es difícil no pensar que hay un propósito detrás de ello", dijo Jiang. "Las acciones de The New York Times, que atacan a un grupo religioso y causan un daño real, violan el valor fundamental estadounidense de la libertad religiosa".
Según los testimonios de los denunciantes y los informes de las fuerzas del orden, las tácticas empleadas para intimidar y socavar al grupo incluyen acciones legales coordinadas, desinformación a través de personas influyentes en las redes sociales y amenazas físicas.
Desde la primavera de 2024, una serie de amenazas de bomba y muerte tuvieron como objetivo los lugares de actuación y las instalaciones de entrenamiento de Shen Yun.
En febrero de este año, la función inaugural de Shen Yun en el Kennedy Center de Washington se vio interrumpida por una amenaza de bomba enviada por correo electrónico al recinto. El correo electrónico afirmaba que se había colocado un explosivo en el interior. Tras una investigación de la Policía de Parques de EE. UU., la amenaza se consideró falsa y la función se desarrolló según lo previsto.
Dragon Springs, la sede de Shen Yun en el norte del estado de Nueva York, donde viven y estudian sus alumnos, también recibió una amenaza de bomba en marzo.
Los autobuses de la gira de Shen Yun con frecuencia también son objeto de sabotajes. En marzo de 2024, los neumáticos de dos de los autobuses de la compañía en Costa Mesa, California, fueron pinchados de tal manera que aparentemente reventarían en la autopista.
Jiang dijo que el agresivo enfoque del PCCh en Shen Yun no es casualidad. "Shen Yun es el proyecto insignia de Falun Gong, al igual que los Poemas de Tiananmen lo fueron para los activistas prodemocráticos en el extranjero. Y al igual que entonces querían destruir nuestro trabajo, ahora quieren destruir Shen Yun".
Añadió que el PCCh tiene un largo historial de amenazas y acoso a los familiares de los disidentes que aún viven en China. Mientras recopilaba los Poemas de Tiananmen, el PCCh se cebó con sus familiares para presionarle a abandonar el proyecto.
"El PCCh busca tus puntos débiles", afirmó. "Explotará cualquier canal a su alcance para amenazar, chantajear e intentar quebrantar tu voluntad. Así es como se ve la guerra sin restricciones".
Según Jiang, el Partido ahora ve a Falun Gong como su oponente ideológico más organizado y persistente.
"El grupo Falun Gong ha expuesto los crímenes del comunismo de manera más efectiva que cualquier otro grupo", dijo. "A los ojos de un régimen ateo, las personas de fe que se unen forman una fuerza poderosa e inquebrantable. Eso aterroriza al PCCh".
Además, afirmó que apoyar a Falun Gong no es solo defender a un grupo, sino defender los principios sobre los que se fundó Estados Unidos.
"Estados Unidos se construyó sobre la fe y la libertad. Apoyar a Falun Gong es, de hecho, apoyar los valores estadounidenses, apoyar al pueblo estadounidense y proteger los intereses nacionales", afirmó Jiang.
Con información de Song Tang y Yi Ru.
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