Casi el 60 % de la provincia oriental de Santiago de Cuba, la segunda del país, continúa sin electricidad dos semanas después del paso del huracán Melissa por la región, informaron este jueves las autoridades.
El gobierno de Cuba consideró que, 16 días después del paso del ciclón, la situación de la zona afectada es "compleja y difícil".
El presidente Miguel Díaz-Canel, encabezó una reunión del Consejo de Defensa Nacional, en la que el primer ministro Manuel Marrero informó que más de 149,000 viviendas y 158,000 hectáreas de cultivos resultaron afectadas.
Solamente Santiago de Cuba enfrenta daños a más de 95,000 viviendas, 2300 con derrumbes totales, según explicó la presidenta del Consejo de Defensa de ese territorio, Beatriz Johnson, durante la reunión televisada.
En ese apartado señaló que el énfasis con la higienización tiene que ver con la actual situación epìdemiológica, en la los municipios Palma Soriano, Songo La Maya, San Luis y Santiago están afectados por la epidemia declarada en el país de dengue y el chikunguña, enfermedades transmitidas por la picadura del mosquito Aedes Aegypti.
De acuerdo a la actualización, la recuperación eléctrica en la capital de provincia avanza al 84 %.
Respecto al abastecimiento de agua potable, en la provincia se ha restablecido el 68 % a través de las redes hidráulicas, y en la ciudad cabecera es del 60 %.
La telefonía móvil en la provincia apenas ha sido restablecida al 48 %.
Las autoridades de la provincia Guantánamo informaron que el 26 % de las 15,000 viviendas afectadas han sido reparadas, mientras que la electricidad ha sido restablecida prácticamente en su totalidad.
Holguín, la provincia por donde salió Melissa, reportó en las últimas 72 horas persistentes lluvias asociadas a la llegada de un frente frío, lo que obligó a la evacuación de cientos de personas en varias localidades por inundaciones, según refirió el presidente del Consejo de Defensa en esa zona, Joel Queipo.
Sobre las labores de recuperación citó el 83.8 del suministro de agua, el 86 % de la electricidad y el 89 % de la comunicación telefónica.
El huracán Melissa tocó tierra en Cuba en la madrugada del miércoles 29 de octubre con categoría 3 (de 5) en la escala Saffir-Simpson y cruzó su extremo oriental durante unas siete horas con fuertes vientos de hasta 200 kilómetros por hora, intensas lluvias y una severa marejada ciclónica que provocaron además intensas inundaciones.
Su intenso azote sobre las provincias Granma, Santiago de Cuba, Holguín, Las Tunas y Guantánamo, dejó un panorama de destrucción en infraestructuras como puentes y vías, comunidades aisladas por las inundaciones debido a crecidas de los ríos, así como interrupciones en servicios básicos y la circulación del transporte.















