El líder de los derechos civiles, el reverendo Jesse Jackson, fue hospitalizado, según un anuncio de la organización activista que él mismo fundó.
En un comunicado emitido la noche del 12 de noviembre, la Rainbow PUSH Coalition dijo que Jackson, de 84 años, había sido ingresado en el hospital.
"La familia agradece todas las oraciones en este momento", dijo el comunicado.
La coalición añadió que estaba en observación por parálisis supranuclear progresiva (PSP), una enfermedad neurodegenerativa.
El reverendo había estado controlando los síntomas de su enfermedad durante una década, según el grupo. Los médicos le diagnosticaron inicialmente la enfermedad de Parkinson en 2017, pero en abril confirmaron que se trataba de PSP, añadió.
Jackson fue un estrecho colaborador de Martin Luther King Jr. y se convirtió en una figura destacada de la comunidad afroamericana durante el movimiento por los derechos civiles tras el asesinato de King.
Era considerado por muchos como el protegido de King. King había nombrado a Jackson en 1966 primer director del programa de colocación laboral de la Conferencia de Liderazgo Cristiano del Sur, denominado Operación Breadbasket, en Chicago. Jackson amplió la operación hasta tener presencia en 17 ciudades diferentes.
Jackson fue ordenado ministro bautista en 1968. Se presentó sin éxito en dos ocasiones a las primarias demócratas para la presidencia en 1984 y 1988.
Jackson fundó su propio grupo de derechos civiles, People United to Save Humanity, en el sur de Chicago en 1971, que más tarde se convirtió en la Rainbow PUSH Coalition.
El grupo trabajó para fomentar la contratación de minorías en el mundo empresarial y para animar a las comunidades de color a registrarse para votar y hacerse oír en el proceso político. Se convertiría en uno de los primeros en sugerir el pago de indemnizaciones a los descendientes de esclavos negros.
En 2000, el presidente Bill Clinton le concedió la Medalla Presidencial de la Libertad.
Jackson tenía una relación complicada con el expresidente Barack Obama, cuyas familias se conocían bien, ya que ambos eran de Chicago.
En un momento de micrófono abierto en Fox News durante la campaña presidencial de Obama en 2008, se oyó a Jackson susurrar: "Verás, Barack ha estado hablando mal de los negros sobre esta cuestión religiosa. Quiero cortarle los huevos". Más tarde se disculpó por sus comentarios y expresó su arrepentimiento.
Jackson, cuya candidatura había sido respaldada por los Socialistas Democráticos de América, asistió al funeral del dictador socialista venezolano Hugo Chávez en 2013 y elogió al líder.
Durante las protestas de Black Lives Matter en el verano de 2020, Jackson criticó a los manifestantes de Chicago por "saquear, robar y robar", calificándolo de "humillante, vergonzoso y moralmente incorrecto".
La organizadora de Black Lives Matter en Chicago, Ariel Atkins, respondió que Jackson "no tiene nada que ver con Black Lives Matter" y que "puede guardarse sus opiniones para sí mismo".
Jackson dimitió en 2023 de la dirección de la Rainbow PUSH Coalition por motivos de salud.
"Soy alguien. Verdes, amarillos, marrones, negros o blancos, todos somos perfectos a los ojos de Dios. Todo el mundo es alguien. Detengan la violencia. Salven a los niños. Mantengan viva la esperanza", dijo en ese momento.
















