MIAMI—Pasaron más de 65 años desde que el régimen de Fidel Castro obligó a Dionel y Marina Cotanda a abandonar su amada Cuba para irse a Estados Unidos.
Solteros y con solo 65 dólares entre los dos —debido a que los comunistas les robaron el resto de su dinero—, se exiliaron en Tampa, Florida.
"Pensaron que era temporal", declaró su hija, Lourdes Cotanda-Ercia, a The Epoch Times.
Sin embargo, a medida que el manto del comunismo se cernía sobre su patria, hicieron de Estados Unidos su hogar, donde lograron un matrimonio exitoso, el servicio militar, títulos académicos, éxitos empresariales, un liderazgo comunitario abierto, tres hijas y varios nietos.
A medida que crece el interés por el comunismo entre los jóvenes estadounidenses, los Cotanda, al igual que otros inmigrantes cubanos, celebran la decisión de Florida de crear el primer currículo escolar que enseña la oscura historia de la ideología que conocen tan bien.
La Junta de Educación del Estado de Florida, bajo la dirección de los legisladores estatales, votó el 13 de noviembre para agregar lecciones sobre la historia del comunismo a los estándares de Estudios Sociales para los estudiantes de sexto a duodécimo grado para el año académico 2026-27.
"Los nuevos estándares de Historia del Comunismo de Florida garantizarán que los estudiantes aprendan la verdad sobre las brutales realidades de la vida bajo el comunismo y adquieran una apreciación más profunda de las bendiciones de la libertad que definen a nuestra nación", declaró entonces el Comisionado de Educación, Anastasios Kamoutsas.
Cuando Dionel Cotanda huyó de Cuba hace 65 años, su corazón se desgarraba.
En la terminal del aeropuerto colgaba una cita de José Martí: "Solo los cobardes abandonan la patria".
"¿Soy un cobarde por irme?", se preguntó Cotanda.
Pero, tras años de ver a Castro ascender al poder y consolidar su influencia sobre las mentes de sus vecinos y el control sobre sus negocios, Cotanda se mantuvo firme en su decisión.
En su tesis doctoral, afirmó que al principio simpatizaba con Castro, pero pronto se distanció del comunismo. Describió la toma de posesión como una "revolución de los callos", una metáfora que alude a una revuelta impulsada por trabajadores curtidos y no por las élites.
Fidel Castro se dirige a una multitud desde un podio en Camagüey, Cuba, el 4 de enero de 1959. (Hulton Archive/Getty Images)."Hasta que no te pisaban los pies, no reaccionabas", dijo.
Trabajando para la Goodyear Tire and Rubber Company en ese entonces, Dionel logró un traslado a Tampa luego de que el estado pusiera a un zapatero al azar a cargo de la fábrica de Goodyear en la isla simplemente por ser miembro del Partido Comunista desde hacía mucho tiempo.
Marina Cotanda, quien estudiaba periodismo en ese entonces, declaró a The Epoch Times que se opuso a Castro desde el principio y que vio cómo manipulaba los corazones y las mentes de sus vecinos.
Se colocaron letreros en las puertas que decían "Fidel, esta es tu casa" y las escuelas comenzaron a enseñar a los niños a ver a Castro como su padre. También recordó haber visto a Castro y a sus hombres desfilar por la calle frente a su apartamento en La Habana con rosarios para engañar a los católicos practicantes y que se exhibieran públicamente.
Marina Cotanda está preocupada por la creciente influencia del comunismo en Estados Unidos. Aseguró que el problema no se limita a los jóvenes y señaló a adultos con creencias similares que ya se desempeñan en la política y la educación.
"Los comunistas [están aquí], avanzando poco a poco", dijo. "Estoy completamente segura. Pero no es momento de salir del clóset". "Tienen que permanecer en la sombra", dijo.
José Ramón Pérez Campos no llegó a Estados Unidos hasta 1992, tras crecer en la isla y trabajar como cineasta. Ahora, abuelo de sesenta y tantos años, habló con The Epoch Times en una tabaquería de La Pequeña Habana y compartió cómo vio al régimen de Castro robar dinero y tierras al pueblo y tener la última palabra sobre todas sus producciones cinematográficas. Varios de sus guiones fueron confiscados y aún no han visto la luz.
"La gente tiene mala memoria", dijo.
"Viví la experiencia, y no funciona", añadió. Si me pudieras decir un país donde trabajen socialistas o comunistas, te regalaría unos puros. No tienes ejemplos en ninguna parte. Ni en Nicaragua ni en Venezuela.
El edificio del Departamento de Educación de Florida en Tallahassee, Florida, el 25 de julio de 2023. La Junta Estatal de Educación de Florida votó por unanimidad el 13 de noviembre añadir lecciones sobre la historia del comunismo a los estándares de estudios sociales para los grados sexto a duodécimo a partir del año escolar 2026-27, tras la aprobación de una ley en 2024. (Joe Raedle/Getty Images).
Cambiando los Estándares
Estos sentimientos impulsaron la decisión de Florida de incluir la historia del comunismo en el currículo.Justo antes de la votación unánime, Layla Collins, miembro de la junta de educación, recordó una conversación que tuvo con un hombre que huyó del socialismo y estaba a punto de ser padre. Él le dijo que él también veía la creciente tendencia favorable hacia el socialismo en Estados Unidos y que eso le asustaba.
Esa conversación, junto con su propia comprensión de la creciente tendencia hacia el comunismo en todo el país, la impulsó a conversar con su esposo, entonces senador estatal.
Esa conversación daría lugar a la redacción y presentación del Proyecto de Ley del Senado 1264, que el gobernador Ron DeSantis firmó en abril de 2024, encomendando al Departamento de Educación la tarea de incorporar la historia y los peligros del comunismo a su currículo. "No tenía idea de que nos enfrentaríamos a esta intersección en la que nos encontramos ahora, donde tenemos la violencia política en aumento, el socialismo y el comunismo penetrando cada avenida de nuestra vida y cada aspecto de la educación de nuestros hijos, pero los patrones eran bastante profundos y obvios", dijo Collins.
Retrato oficial del vicegobernador de Florida Jay Collins en 2025. El proyecto de ley 1264 del Senado, redactado por el entonces senador estatal Collins, tiene como objetivo enseñar a los estudiantes a reconocer los regímenes comunistas y contrastar sus sistemas con la república constitucional capitalista de libre mercado de Estados Unidos. (Gobierno de Florida).Si bien más del 80 por ciento de los estadounidenses aún tienen una visión desfavorable del comunismo, uno de cada tres estadounidenses menores de 30 años tenía una visión favorable de esta ideología, según una encuesta reciente de Cato y YouGov.
La encuesta también reveló que el 28 por ciento de los residentes de las grandes ciudades tenía una visión favorable del comunismo. Estos resultados se publicaron meses antes de que la ciudad de Nueva York votara por el socialista demócrata Zohran Mamdani como su próximo alcalde.
"Esta ideología ha provocado la opresión, el sufrimiento y la muerte de millones de personas, y nuestros estudiantes merecen una educación que refleje esa realidad", declaró Collins.
Dionel Cotanda no cree que Estados Unidos corra la amenaza de una deriva hacia el comunismo y el socialismo.
"Tengo mucha fe en las instituciones aquí", afirmó. "Creo que son lo suficientemente fuertes como para superar ese problema".
Dionel y Marina Cotanda fotografiados juntos en Tampa, Florida. La pareja huyó de Cuba hace 65 años, tras presenciar el ascenso al poder de Castro. (Cortesía de Lourdes Cotanda-Ercia).
Educación Equilibrada
El siguiente paso para los líderes educativos de Florida es incorporar los estándares en los libros de texto e instrucciones que se implementarán el próximo año."Estamos adoptando estos estándares hoy para luego incorporarlos en los cursos que la junta considerará", declaró Paul Burns, rector principal del Departamento de Educación de Florida, a la junta el 13 de noviembre.
Yuleisy Mena, directora ejecutiva del Museo y Biblioteca de Bahía de Cochinos, quien también huyó de la Cuba comunista en 1992, expresó su esperanza de que el cambio curricular brindara una educación más equilibrada.
"Los estudiantes a menudo reciben instrucción sobre el fascismo, en particular a través de una excelente e integral educación sobre el Holocausto; sin embargo, la historia y las consecuencias reales del comunismo no siempre se enseñan con la misma profundidad", afirmó. "Para fomentar un verdadero pensamiento crítico, los estudiantes deben estar expuestos por igual a todos los principales sistemas políticos, incluyendo las estadísticas documentadas, el sufrimiento humano y las consecuencias históricas asociadas con los regímenes comunistas".
Un monumento en honor a la Brigada Invasora de Bahía de Cochinos se erige en Miami el 18 de noviembre de 2025. Yuleisy Mena, directora ejecutiva del Museo y Biblioteca de Bahía de Cochinos y exiliada cubana desde 1992, dijo que espera que el cambio en el plan de estudios traiga consigo una educación más equilibrada. (T.J. Muscaro/The Epoch Times).Mena fue profesora de estudios sociales durante 10 años, obtuvo su doctorado y ahora enseña en la Universidad Internacional de Florida.
Los cambios curriculares solo afectan a los estudiantes hasta el final de la secundaria, pero a Cotanda-Ercia le preocupa el ambiente pro-socialista que mantienen los profesores en la universidad.
"Cuando [mi hija] Alexis fue a [la Universidad de Florida], se dio cuenta enseguida de lo liberales que eran los profesores", dijo.
Si quería sacar una A, escribía un trabajo de acuerdo con las opiniones del profesor, no con las suyas, dijo Cotanda-Ercia. Su sobrino hizo lo mismo.
"Lo hacían solo para terminar la clase. Pero eso era algo muy importante en aquel entonces", dijo.
Una encuesta reciente realizada en Northwestern y la Universidad de Michigan reveló que el 88 por ciento de los estudiantes fingían tener opiniones de izquierda para apaciguar a sus profesores.
